Suena el teléfono en FUNDATUL, se iluminan los ojos de la gerente y la máquina comienza a funcionar. Había llamado un empresario hostelero que abría las puerta de su negocio al empleo inclusivo.
Cada día son más las empresas socialmente responsables que nos dan la oportunidad de demostrar que las personas con discapacidad son los candidatos que necesita nuestro entorno laboral y es nuestra lucha diaria por conseguir que todos podamos tener los mismos derechos y oportunidades.
Hoy toca agradecer a ASADOR GUADALMINA la oportunidad de empleo que ha brindado a la diversidad funcional, cumpliendo el sueño de uno de nuestros chicos. Decía, «mi ilusión en la vida es ser camarero» y eso se hizo realidad.